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Por Karla Martín
karlamartin1@hotmail.com
 
 
Es tradición para nosotros los dominicanos comer habichuelas con dulce en Semana Santa. Las mismas son deliciosas y, por supuesto, no tiene nada de malo comer una tacita de postre; pero, ¿qué pasa cuándo nos comemos esa tacita cada una hora o peor aún, un bowl después de cada comida?
 
Cabe destacar que la habichuela es una de las legumbres más nutritivas. Es una fuente natural de proteínas y fibra, así como de minerales, vitaminas (ricas sobre todo en las del grupo B)  y aminoácidos. Alto contenido en acido fólico  por lo que es muy recomendado para mujeres embarazadas. Además, las habichuelas también están recomendadas para los alérgicos al gluten, ya que es un alimento muy nutritivo y está libre de gluten.

Estudios aseguran que por su cantidad de fibra, la habichuela previene cáncer de colon y es la que tiene mayor número de antioxidantes de toda la familia. Se recomienda también que mientras más rallada es la cáscara de la habichuela más antioxidantes contiene. De hecho, está considerada como uno de los 20 alimentos con más antioxidantes naturales.
 
Pero recuerda que los excesos nunca son buenos y la combinación de las habichuelas con leche, coco, azúcar, mantequilla, entre otros; y sobre todo si la comemos en exceso, puede causar flatulencia, indigestión y toxicidad.
 
Si ya te diste tu buen gusto de las habichuelas con dulce, este jugo te ayudará a limpiar el colon y el intestino, que son los órganos más afectados por el exceso de habichuelas.
 
Ingredientes:
• Media taza de piña en trocitos
• Una cucharada de semillas de linaza remojada por ocho horas
• Jugo de un limón
• Una cucharadita de jalea real
• Una sopera de miel de maguey

Preparación:
Se licúa todo en una taza de agua y sirve. Es recomendable consumir en ayunas.

Receta: Nutricionista Oscar Chavez, perunatural.com  
Foto: Fuente externa
  
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